19
Abril de 2018
¿Qué
sucede con esta generación tomada por el mal ?
Es un sinsentido todo cuanto está aconteciendo. Los valores más
denigrantes y trasgresores aunados con el anarquismo en todas sus
formas están en alza. Lo bueno ahora es malo, y lo malo, bueno. La
verdad, mentira y la mentira, verdad. La deformidad física
voluntaria y sexual es un valor, y además, se fomenta. Incluso se
promueve masivamente el asesinato mediante el aborto. Se procura
derrocar cualquiera de los pilares en los que hasta ahora se ha
fundamentado la sociedad, y en concreto este país (monarquía,
Estado, iglesia), para “conducirnos al abismo económico, político,
social y espiritual”. Y hacia la penumbra nos guían elementos
subversivos en la sombra, tanto a nivel nacional como internacional,
a golpe de tergiversación y manipulación.Pero tanto llaman la atención estas repentinas y enfervorecidas oleadas instigadas por el mismo demonio, como "el silencio de los corderos"; los que se supone, militan en las filas del bien; los cuales, callaron y continúan callando sumidos en la más profunda omisión. Parece que los corderos inmovilizados por la cobardía y el miedo, ya se transformaron en canes son voz.
Lo
que hace menos de una década era impensable, ahora es lo normal y lo
que antes era normal ahora es inadmisible, puesto que “el mal sí
se ha impuesto” y lo ha hecho bajo el pretexto del diálogo, la
igualdad, el respeto, la tolerancia y la participación; conceptos
éstos que ha utilizado a conveniencia para una vez lograda y
conseguida su implementación e instauradas sus políticas satánicas
en la arena política, dejar de emplear lo que ellos reivindicaban, y
sustituirlo únicamente por “su autoritaria imposición”. Los
nobles valores esgrimidos por los malvados, fueron sólo la piel de
cordero para que el lobo penetrara en el redil, y una vez dentro, ya
no le hizo falta y éste se despojó de su disfraz.
La
juventud bien apertrechada en un cúmulo de erróneos conceptos
“anti-sistema” adquiridos y dispensados por los instigadores del
mal durante años -durante su etapa de formación-, se ha convertido
ahora es un arma arrojadiza en manos de personajes grotescos e
irreverentes que los manipulan y los lanzan en masa en la dirección
que ellos predeterminan. O bien, se les despojó de todo tipo de
creencias religiosas –e incluso se les animó a odiarlas- o bien,
se les enmarañó en una amalgama de diversas filosofías de la nueva era ,
para evitar que llegara a ellos un mínimo resquicio de verdadera luz
espiritual.
Todas
las armas de la oscuridad toman ahora máxima relevancia. Por medio
de la publicidad, televisión e internet se contaminó la mente del
ser humano, haciendo que éste en caso de razonar, lo hiciera bajo
las premisas de Satanás, es decir, de una forma equivocada; por
medio de las nuevas tecnologías y redes sociales se comunica
instantáneamente con grandes grupos para emplearlos como ariete en
falsas campañas argumentadas bajo medias o completas falacias y
conseguir así sus verdaderos objetivos, ocultos a la mayoría. Por
medio de los tatuajes se acostumbró a profanar el cuerpo humano,
templo del Espíritu Santo, y se allanó el terreno para que
individuo aceptase injertarse el microchip –lo cual ya está
sucediendo en algunos países-, como una novedad más.
Es
que estamos en los tiempos en que está en auge y se prima y valora
lo descarriado, lo “anti todo”, lo fracturador, lo bajo, lo
vulgar, lo satánico y la perversión extrema; y si mañana surgiera
otra nueva moda aún más denigrante o transgresora, ésta adquiriría
de inmediato nuevos adeptos. Y en esta línea y en estas políticas
se mueven aunados por un denominador común, que es “sembrar el
caos”: Comunistas, Podemos,
anarquistas, LTGB,
republicanos y otros grupos afines a ellos.
También
a las instituciones públicas llegaron estos aberrantes lobos
depredadores; algunos disfrazados hasta ahora. Esperaron a ocupar el
cargo, y esperaron también al momento oportuno para dar a conocer su
verdadero rostro. Ahora, bajo argumentos de repensar el sistema, de
acabar con las viejas estructuras porque la sociedad ha cambiado y
esgrimiendo maliciosa y nuevamente el concepto de respeto y libertad,
se erigen como promotores de cambios radicales utilizando a la
juventud agrupada en estos nuevos tsunamis humanos para dirigirlos
hacia el mismo infierno, pues todas las políticas que promueven
conducen individualmente al alma a su condenación.
Hablan
de respeto y libertad, ¿pero dónde está el respeto y la libertad
del nonato ya existente, indefenso y asesinado? ¿Dónde está el
respeto y la libertad para los padres que quieren educar a sus hijos
conforme a las Leyes de Dios sin que los confundan o les impongan la
ideología de género ?
¿Dónde está el respeto hacia tantas personas –y en especial
hacia las personas mayores- que profesan la fe cristiana y que no
quieren ver cómo lo que para ellos es lo más sagrado es atacado ,
burlado y profanado ?
Complementan
este desvío masivo que guía hacia la implantación del Nuevo Orden
Mundial las grandes empresas e instituciones internacionales,
empleando para ello su dinero (financiación), campañas
publicitarias, postulados y dictámenes; y cuyos hilos mueven en la
sombra masones e illuminatis. En esta representación orquestada a
nivel mundial el máximo protagonista –o eso creen ellos- será el
“falso pacificador” que entrará en acción en medio de la
Tercera Guerra Mundial ya en ciernes, obrando milagrosos y
fraudulentos prodigios: el Anticristo.
Sé
que para futuras generaciones, ésas que poblarán la nueva tierra
tras la renovación del mundo y tras el Apocalipsis que ya estamos
viviendo, no será sencillo comprender cómo se pudo pervertir tanto
ésta, la actual. Es precisamente, lo que nos ocurre ahora a muchos
de nosotros: no entendemos cómo es posible que se susciten estos
diabólicos cambios en tan poco tiempo; pero recordemos, que la
“Escritura debe cumplirse” (Jn 15:25).
Marcial Franco B.
